Con los nuevos Galaxy S25 ya "en la calle", todas las dudas sobre qué procesadores montaría han terminado de disiparse. Samsung nos confirmaba hace un par de días que todos, tanto el Ultra como los modelos Plus y base, llevarían el musculoso Snapdragon 8 Elite, así que, este año, no tendremos que elegir terminal en base a este componente. Sea cuál sea de los tres el que compremos, tendremos la potencia de este chip.
Esto, evidentemente no ha pasado desapercibido. Lo que quizás no ha llamado tanto la atención es Snapdragon Satellite, la función que incluye este chip y que puede dotar de conectividad satélite a cualquier smartphone compatible. La buena noticia es que los tres modelos Galaxy S25 son compatibles.
No tener cobertura ya no te impedirá llamar o enviar mensajes urgentes
Además de montar el chip más potente del mercado en estos momentos, los Galaxy S25 viene con un procesador en el que Qualcomm ha trabajado codo con codo con Samsung para afinarlo y personalizarlo para éstos. Se ha conseguido así un rendimiento un 40% superior en NPU, de un 37% más en CPU y de un 30% más en GPU si tomamos como base de la comparación al Galaxy S24 Ultra con el Snapdragon 8 Gen 3.
Son muchas las bondades de este nuevo chip, pero en lo que a conectividad satélite se refiere, lo mejor es que los nuevos Galaxy son los primeros terminales Android que cuentan con esta posibilidad. Así pues, gracias a Snapdragon Satellite, los gama alta surcoreanos podrán hacer llamadas o enviar mensajes en cualquier punto del planeta al que llegue la cobertura de Starlink o satélites de comunicación similares.
Imagen | Grok con edición
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