Samsung es una de las compañías más potentes del mundo y su presencia no es sólo relevante en la industria tecnológica. Después de conocer los orígenes de Samsung, hemos visto que factura millones con la construcción y también que durante 20 años se dedicó a fabricar aviones.
Samsung ha perseguido en todo momento la innovación. Cualquier límite establecido ha intentado sobrepasarlo para llevar más allá la experiencia que sus usuarios tenían con los smartphones de la marca. Hace ya más de quince años que la serie Galaxy está entre nosotros y qué mejor momento para recordar cómo empezó todo y ver hacia dónde va.
Un paseo por la historia de los teléfonos de Samsung
Samsung siempre supo ver el potencial de un teléfono móvil y quiso trabajar en desarrollar un dispositivo multifuncional. De hecho, fue en 1999 cuando por primera vez se anunció el lanzamiento de un teléfono con televisión. Al mismo tiempo que la cámara del Samsung B600, con 10 MP, permitía obtener fotografías. O el SPH-M2500, que introdujo la reproducción MP3 en los teléfonos móviles.
Así fue como se abrió la puerta al entretenimiento en los teléfonos de la época. Las ideas no paraban de surgir y, mucho antes de que existieran los que hoy conocemos como smartwatch, también en 1999, Samsung desarrolló el primer reloj-teléfono, pensado para incrementar la productividad de sus usuarios.
A lo largo del tiempo, esta ha sido la máxima para la compañía surcoreana: mejorar la experiencia del usuario en todo momento. Por eso, en 2002, se lanzó al mercado el Samsung True Color, que incorporaba una pantalla LCD de matriz activa, girando la tendencia hacia lo que iban a empezar a ser los Galaxy de hoy en día.
A base de pruebas, Samsung empezó a aprender cada vez más qué es lo que necesitaba el usuario: lo que quería, lo que le ayudaba en su día a día, lo que le aportaba más libertad... Y se situó como líder en la industria de los primeros smartphones. Por eso, se unió a Android y decidieron comenzar un camino juntos y así crear la familia Samsung Galaxy.
Serie Galaxy, de principio a fin
Fue precisamente en marzo de 2010 cuando Samsung presentó el primer dispositivo de la serie Galaxy S, siendo el germen de los que hoy que son los smartphones más conocidos del fabricante. Este primer Galaxy S contaba con una pantalla de 4 pulgadas Super AMOLED y una cámara de 5 MP y fue continuado por los Galaxy SII y Galaxy SIII.
Un año después, en 2011, vimos nacer al Galaxy Note, y Samsung de nuevo estableció una nueva categoría: teléfonos inteligentes, con pantallas grandes y un complemento que no habíamos visto hasta ese momento: el S Pen. Las pantallas de los Galaxy eran cada vez más grandes y la incorporación de un lápiz óptico ofrecía al usuario la posibilidad de poder llevar a cabo tareas más diversas. De modo que se estableció una nueva forma de interacción entre el usuario y el dispositivo.
Con el paso de los años hemos visto cómo los distintos modelos y versiones de los Samsung Galaxy han ido renovándose poco a poco. Incorporando novedades, cambiando de diseño, seguían apostando por elevar la experiencia del usuario. Un ejemplo de esto fue la pantalla Edge, un diseño curvo que pretendía causar una sensación de "Infinity Display" aumentando el tamaño de la pantalla sin que realmente se incrementasen las dimensiones del dispositivo y mejorando la experiencia de visualización de contenido.
Igualmente se fueron desarrollando también nuevas funciones y servicios: como Samsung Knox o Samsung Pay, que han servido para consolidar una realidad más conectada para los usuarios de Galaxy. Además, el pasado 2018 vimos por primera vez una Infinity Plex Display, que marcó el inicio de los smartphones plegables.
Qué esperamos de Samsung a partir de ahora
Samsung ha marcado un estándar de innovación que hemos seguido viendo con el paso de los años y seguiremos viendo en el futuro. Porque, está claro, que todavía tenemos mucho que ver.
A comienzos de este 2025 se celebró el último Galaxy Unpacked de la compañía, un evento donde se lanzó de forma oficial la serie Galaxy S25, que nos dejaba ver a todos los integrantes de la familia: Galaxy S25, Galaxy S25+ y Galaxy S25 Ultra. Y donde nos dieron pinceladas de un nuevo modelo que hasta ahora no habíamos visto, el Galaxy S25 Edge y un posible Galaxy triplegable.
Lo que está claro es que Samsung ha sabido cómo hacer las cosas para estrechar, cada vez más, la relación entre el usuario y su Galaxy. Integrando funciones que se han vuelto imprescindibles en el día a día, como todas las que ofrece Galaxy AI.
Imágenes | Samsung
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